Cosas que olvidamos tiempo atrás,
Tan enterradas que parecieron no existir,
Cosas que no pensaba sentir jamás,
Por miedo a volver a sufrir.
Te empiezas a volver loco,
Todo deja de tener sentido,
La vida te sabe a poco,
Te desvías del camino.
Pero entonces llega ella,
Sin saberlo te cautiva,
De entre todas la más bella,
Con un beso cicatriza la herida.
Su mirada alegre y traviesa,
Profundos océanos de sueños,
Sus ojos color turquesa.
Presente en cada paso, letra y esquina,
Sus caricias recomponen mi alma,
Sus manos muestran la salida.
Es la reina del baile, la música y la vida,
Sus labios bailan el ritmo,
Sus piernas tocan la melodía.
Culpable de mi felicidad, mi sonrisa, mi alegría,
Recuperando poco a poco el sentido,
Contagiándome su energía.
Risueña, sincera y atrevida,
Para mi, única y perfecta,
Enamorándome cada día.
Como el fuego al hielo,
El corazón me derrites,
El juicio me abandona por tus hoyuelos.
Enganchado a ti, te soy sincero,
Qué mejor forma que terminar este sinsentido,
Que con una Posdata: Te quiero.
Tan enterradas que parecieron no existir,
Cosas que no pensaba sentir jamás,
Por miedo a volver a sufrir.
Te empiezas a volver loco,
Todo deja de tener sentido,
La vida te sabe a poco,
Te desvías del camino.
Pero entonces llega ella,
Sin saberlo te cautiva,
De entre todas la más bella,
Con un beso cicatriza la herida.
Su mirada alegre y traviesa,
Profundos océanos de sueños,
Sus ojos color turquesa.
Presente en cada paso, letra y esquina,
Sus caricias recomponen mi alma,
Sus manos muestran la salida.
Es la reina del baile, la música y la vida,
Sus labios bailan el ritmo,
Sus piernas tocan la melodía.
Culpable de mi felicidad, mi sonrisa, mi alegría,
Recuperando poco a poco el sentido,
Contagiándome su energía.
Risueña, sincera y atrevida,
Para mi, única y perfecta,
Enamorándome cada día.
Como el fuego al hielo,
El corazón me derrites,
El juicio me abandona por tus hoyuelos.
Enganchado a ti, te soy sincero,
Qué mejor forma que terminar este sinsentido,
Que con una Posdata: Te quiero.