Nuestros los amores
vespertinos
Que despiertan con la
primavera
Tu mirada,
penetrante, de felino
Mi alma, desde
siempre, a tu vera.
Instantes infinitos
entre el vino
En tu sol encuentro mi
destino, mi cruz
Avanzando, haciendo
el camino
Como los veranos en
el sur.
Cautivo de tus
madrugadas
Es tu cuerpo mi
precipicio
En mi corazón redoblan
las campanas
Tú, la causante de
mis vicios.
Tu melena dorada
espiga
El fuego que calienta
mis entrañas
Las mariposas en la
barriga
En ti mi hogar, mi
España.
Tu blusa me suplica
que la desabroche
Los mordiscos por tu
espalda
El secreto de
nuestras noches
El gusto que esconde
tu falda.
Desayunos de sal
frente al mar
Caricias de amor
infinito
El seno que esconde
ese lunar
La muesca de tus
labios, lo más bonito.
Son tus días mi
fortuna
Los instantes en la
isleta
De los desaciertos mi
vacuna
La cura de mis
grietas.
Son tus risas mis
canciones
Mi locura por tu
reclamo
Son tus besos de
sabores
Los susurros de un te
amo.